La historia de Brigitte Macron
La Primera Dama de Francia no es ajena a los medios de comunicación y a la controversia. A principios de 2018, encontró su camino en las librerÃas de ±Ê²¹°ùòõ la primera biografÃa no oficial sobre la vida de Brigitte Macron.
Si aún no conoce la historia de Brigitte Macron y cómo llegó a casarse con el ahora gobernante de Francia Emmanuel Macron, entonces continúe leyendo.
Para resumir, Brigitte Macron es 24 años mayor que el Presidente. La pareja respalda su historia en el hecho de que se enamoraron cuando Brigitte todavÃa era maestra… y Emmanuel tenÃa 15 años.
Hoy en dÃa Brigitte tiene 65 años y está felizmente casada con el hombre que conoció hace tantos años. Como se puede imaginar, la historia de cómo llegaron a estar donde están hoy es turbulenta.
A pesar de todo, se dice que Macron es la Primera Dama más querida en la historia de Francia; con una retroalimentación consistente y positiva de todos los que tienen encuentros con ella y de la gente en general.
Ella conserva un tono soleado, es siempre amable, bienhablada y mantiene un alto nivel moral personal en todo momento. En resumen, ella es todo lo que la sociedad tiende a amar en una Primera Dama.
Brigitte y Emmanuel Macron se casaron en 2007, cuando él tenÃa 29 años de edad. En este momento ellos ya se conocÃan desde hacÃa más de 13 años.
Los primeros años de Brigitte Macron
Brigitte Trogneux nació en Amiens, Francia en 1953. Su familia se dedicaba a la ³¦³ó´Ç³¦´Ç±ô²¹³Ù±ð°ùò¹.
En esa época en Francia, ésta era considerada una profesión de elección que derivaba de la tradición familiar. Las hijas e hijos de los ±èâ³Ù¾±²õ²õ¾±±ð°ù²õ eran siempre los más populares en el patio de recreo.
Trogneux trabajó como maestra durante la mayor parte de su vida y durante todo ese tiempo, estuvo casada y tuvo hijos.
Cuando Trogneux tenÃa 39 años, trabajó como profesora en una pequeña escuela secundaria en su ciudad natal de Amiens. Era un curso de teatro en horario fuera de clases que se ofrecÃa para cualquier niño que estuviera interesado.
Brigitte Macron y Emmanuel Macron – por – Wikimedia CommonsFue aquà donde Trogneux tuvo el primer contacto con el niño que luego serÃa su marido.
A los de 15 años de edad, Emmanuel Macron se inscribió en este programa fuera del horario escolar y Brigitte Trogneux se dio cuenta inmediatamente del intelecto y las capacidades del estudiante. Su abrumadora inteligencia es algo de lo que ella habla hasta el dÃa de hoy.
Los dos se acercaban cada vez más a medida que pasaba el tiempo. Cuando los padres de Emmanuel descubrieron lo que estaba pasando, lo enviaron a terminar la escuela en ±Ê²¹°ùòõ, con la esperanza de que cierta distancia ayudarÃa al joven a olvidarse a esta mujer que era 24 años mayor que él.
A pesar de la distancia y la separación, Emmanuel Macron se sostuvo en que algún dÃa se casarÃa con la entonces Brigitte Trogneux.
Los siguientes 13 años fueron dedicados a nutrir su relación desde la distancia hasta que la pareja finalmente se casó en 2007, una vez que el primer matrimonio de Brigitte ya habÃa quedado en el pasado.
Brigitte Macron y el presidente francés
La mayorÃa de la gente tiene la impresión de que los intereses polÃticos de Brigitte Macron se desataron a partir de que ella y el Presidente estuvieron juntos.
La verdad es que Brigitte Macron ha estado involucrada en la polÃtica francesa durante mucho tiempo. Su participación se remonta a la época en que vivió en Truchtersheim, cerca de Estrasburgo.
Ella estaba muy involucrada en asuntos y eventos locales. Incluso en 1989, se lanzó como encargada en muchas campañas de infraestructura dirigidas a mejoras dentro de esa área.
Antes de esto, Macron también trabajo como secretaria de prensa en la Cámara de Comercio de Nord-Pas-de-Calais cuando tenÃa sólo 29 años.
Su último trabajo como Primera Dama de Francia parece absolutamente apropiado dada la historia polÃtica positiva que Macron tiene bajo su cinturón. Juntos, Emmanuel y Brigitte hacen un dúo poderoso y su discreta relación de apoyo se traduce bien en los medios franceses que aman mantenerse al dÃa con la pareja.
La polÃtica parece correr en la familia, y la hija de Brigitte, de nombre Tiphaine, de hecho trabajó en la campaña presidencial de Emmanuel antes de su elección.
La vida de Brigitte Macron en ±Ê²¹°ùòõ
Brigitte Macron ama ±Ê²¹°ùòõ. Si tiene la suerte de verla en el dÃa a dÃa, verá la fluidez con que navega por la ciudad.
A pesar de la variedad de encuentros e iniciativas a las que tiene que asistir como Primera Dama, Macron reserva tiempo, siempre que le es posible, para disfrutar de la ciudad. Una de sus excursiones favoritas resulta ser el teatro. Cualquier guÃa de tour gratuito a pie le señalará una variedad de éstos para ver placenteros espectáculos.
Macron también es conocida por visitar las nuevas exposiciones de los museos en los distritos centrales de la ciudad. Frecuenta las exposiciones rotativas del Centro Pompidou en el distrito 40. .
Muchos de los eventos sociales a los que la Primera Dama tiene la intención de asistir se publican para que el público tome nota. Su popularidad desde las elecciones le ha ganado un club de fans en toda Francia.
Abordando la controversia
En medio de la controversia en torno a su relación, Emmanuel y Brigitte siguen teniendo aplomo y serenidad; nunca sucumben a los rumores o comentarios negativos relacionados con su brecha de edad.
Emmanuel Macron ha sido citado diciendo: “Si yo fuera 20 años mayor que mi esposa, nadie habrÃa cuestionado que fuera una relación legÃtima. Es sólo porque mi esposa es 20 años mayor que yo que la gente dice que no es sostenible”.
Nunca se han dicho palabras más verdaderas, y la pareja merece tanto respeto como cualquier otra pareja casada de edad.
Brigitte Macron de un lado para el otro – por la Casa Rosada – Presidencia de la Nación – Wikimedia Commons
Brigitte es clara cuando se trata de informes duros y no tiene miedo de bromear sobre ella misma y la brecha de edad. Recientemente hizo una observación de que la presidencia de Emmanuel estará llena de problemas a los que se enfrenta, pero que una vez que esto termine, su único problema será su rostro.
¡Aquà tiene a Brigitte Macron!